La Ronda

La Ronda es una calle que nos lleva a nuestro pasado indígena, su nombre original fue “El Chaquiñán”, término que ahora se lo traduce como camino o sendero. En 1480, se presume que esta calle ya se encontraba establecida y trazada cuando los Incas llegaron por primera vez a Quito. Esta calle por su nombre y por estilo característico de sus viejas casas son de puro origen indio. La ronda es un lugar es un lugar que alberga un sin número de tradiciones, de varias épocas y es lugar en el cual se mantiene una amplia memoria de nuestra historia, desde el legado de los indios, pasando por la colonia y finalmente en los poetas que habitaron allí y los artesanos de hoy. Esta pequeña calle de Quito y la más antigua de la ciudad contiene un patrimonio intangible e invaluable por son sus personajes emblemáticos. A finales del siglo XIX, estas casas ya eran muy famosas ya que se conocían sus dueños quienes la mayoría de ellos eran músicos, poetas, bohemios, artesanos, escultores, entre otros. Posteriormente estas casas se convirtieron en habitaciones rentables ya que estas contaban con cuartos disponibles como para que no solo una sino varias familias habiten en ellas. Las casas de la ronda se caracterizan por tener un patio central un segundo piso y sus habitaciones a los lados. Las familias que rentaban estas habitaciones tenían una vida muy sencilla y modesta; por ejemplo una habitación se reducía a una casa con las indispensables comodidades para la vida, y sin mucho espacio ya que estas familias se conformaban mínimo de entre 7 a 9 personas, por ello es que se dice que en la ronda siempre existió un ambiente de vida de barrio.